Miguel López de la Oliva

hace 10 meses · 8 min. de lectura · ~100 ·

Blogging
>
Blog de Miguel
>
Diario de una heroína

Diario de una heroína

0YEcB.png

Parece que fue ayer cuando estábamos confinados… Y ya han pasado tres años. Seguro que muchos no lo han olvidado y ha supuesto un antes y un después, especialmente para aquellos que perdieron a algún ser querido. Exceptuando estos casos, lo que percibo es que hacemos todo lo posible, consciente o inconscientemente, para olvidar aquella situación y mantener nuestro habitual (y alocado) estilo de vida. Durante aquellos días jurábamos y perjurábamos que el confinamiento nos haría más fuertes, mejores personas, pero tres años después nada parece haber cambiado. Las que eran buenas personas siguen siéndolo, y las que eran malas, también. Quizás, eso sí, nos hemos vuelto más victimistas. Reivindicar ciertas causas es loable, pero no hacerse la víctima constantemente, eso no hace bien a nadie.

¿Que por qué me ha dado por hablar sobre la pandemia? Primero, porque somos de olvido fácil y, segundo, porque fui a ver el monólogo La Nueva Normalidad del gran Alex Clavero (súper recomendable, risas contagiosas aseguradas e incluso discursos serios para reflexionar). ¿Realmente hemos aprendido algo de toda esta experiencia? ¿Realmente queremos ser los que éramos antes, y vivir del mismo modo? Ahí queda la pregunta.

Os quiero compartir un relato corto que escribí en el mes de mayo de 2020, para que cuando nos sintamos tristes, estresados, sobrepasados o malhumorados, recordemos aquella situación y que, de alguna manera, volvamos atrás para seguir hacia delante. Hablo de una heroína. Un ser de luz que se apagó intentando mantener encendida la luz de los demás. Una persona luciérnaga. Una persona ejemplar.

Dedicado a mi padrino. Carlos, gracias por todo. Te quiero, te recuerdo y siempre me acompañas.

DIARIO DE UNA HEROÍNA

Sábado, 22/02/202

¡Qué ilusión! Nuestra “pequeña” Miriam va a cumplir los dieciocho. Le estamos preparando una fiesta sorpresa con amigos y familiares. Está siendo difícil compaginar el trabajo y la organización, pero por suerte cuento con la ayuda de Pedro y de Sara (qué habría hecho yo sin ti). Estoy muy orgullosa de ella. Crucemos los dedos para que pueda alcanzar la nota para entrar en la facultad de Medicina y seguir mis pasos.

Pero también estoy intranquila. Esta mañana, poco después de empezar el turno de las 10:00, hemos detectado seis nuevos casos graves de neumonía, dos de ellos afectando a pacientes menores de cincuenta años sin patologías previas que presentaban niveles bajos de saturación en sangre y requerían oxígeno. Presentan síntomas similares a los de los brotes de Wuhan y Lombardía. Queremos creer que no está relacionado con el COVID-19, hemos realizado unas pruebas, pero no conoceremos los resultados hasta dentro de unos días. No descartamos que se trate de una gripe común, pero hemos tomado precauciones aislando a los pacientes para evitar posibles contagios entre el resto de ingresados y el personal sanitario.

Lunes, 24/02/2020

¡Fantástico! Ya hemos cerrado casi todos los detalles importantes de la fiesta sorpresa. Sara está preparando un vídeo con sus fotos y canciones favoritas. Esperamos guardar el secreto y que no nos descubra ahora que falta menos de un mes para celebrarlo…

Desgraciadamente se confirma que los primeros pacientes con neumonía han dado positivo en COVID-19. En tan solo dos días, los casos se han multiplicado exponencialmente en el hospital universitario de Torrejón. Estamos instando a las autoridades y a los medios a alertar del peligro para evitar riesgos innecesarios e informar de la gravedad de la situación. Hemos empezado a doblar turnos ante el aumento de pacientes y empezamos a notar escasez de material esencial, especialmente de batas, mascarillas y guantes.

Jueves, 27/02/2020

Ahora toca pensar en un regalo inolvidable. ¿Qué le gusta a Miriam más que nada en el mundo? ¡Viajar! He hablado con Sara. Su grupo de amigas más cercano planea un viaje por Europa en autocaravana en el mes de julio. París, Berlín, Viena, Roma… ¡Le va a encantar! Sin duda, una experiencia siempre es el mejor regalo porque lo disfrutas al recibirlo y, sobre todo, al vivirlo. Le entregaremos un sobre con un cheque y unas palabras emotivas.

Empiezo a estar asustada. Cada vez hay más ingresos de pacientes que entran directamente en las UCI con pronóstico muy grave, especialmente los más mayores. Mamá, papá, cada vez que les atiendo, me recuerdan a vosotros, y no puedo evitar derramar unas lágrimas cuando termina mi turno. Pero sentiros cerca me ayuda a seguir adelante. Nos estamos coordinando para atender a todos los enfermos, unos trataremos a los sospechosos con síntomas de COVID-19 y otros se harán cargo del resto de urgencias.

Martes, 03/03/2020

¡Qué rabia! Ahora que ya tenemos organizado todo lo importante para la fiesta, me he visto obligada a delegar en Sara y Pedro, sobre todo para contactar con sus amigos para confirmar disponibilidad. Menos mal que puedo contar con ellos.

Estoy preocupada. En el hospital estamos colapsados y empieza a reinar el caos. Doblar turnos no está siendo suficiente y ya hay contagios entre los pacientes más vulnerables con otras patologías. Las UCI cubren los casos más críticos que requieren uso de respiradores. Desde la calle se sigue percibiendo como una simple gripe, sobre todo entre la población más joven. Siguen saliendo a la calle, llenando terrazas y parques. No tienen miedo. Pero no, no saben a lo que nos enfrentamos. Esto es serio. Es una amenaza para todos.

Lunes, 9/03/2020

¡Por fin! Ya tenemos todo preparado. Espero que a Miriam le guste la sorpresa. No podrán venir todos sus amigos, pero sí la gran mayoría de ellos.

Tengo miedo. Llevamos ya varios días sin librar. Han fallecido al menos dos pacientes por COVID-19, uno de ellos mientras me cogía la mano, apretándomela ligeramente hasta que su cuerpo no aguantó más. Esto es muy duro y frustrante. Jamás pensé que tendría que pasar por algo parecido. De camino a casa, me he notado algo cansada, con la garganta irritada y tos seca. Es evidente que tengo síntomas compatibles con el virus. Por precaución, ya llevaba dos días durmiendo en la habitación de invitados, durante el poco tiempo que estoy en casa para descansar. Apenas puedo ver a mi familia.

Desde hace un par de semanas no se habla de otra cosa, en la calle y en los telediarios. La mayoría era moderadamente optimista. Hasta hoy. Percibimos una extraña sensación de vulnerabilidad en la que todos estamos amenazados. El virus no distingue de estatus social, raza o religión. El miedo hace que los supermercados se abarroten, y lo primero que comienza a escasear es la carne, las conservas y, sí, el papel higiénico (nunca lo comprenderé…).

Pedro y los niños están asustados. A mí me cuesta dormir y empiezo a tener pesadillas.

Jueves, 12/03/2020

Apenas encuentro tiempo para descansar, mucho menos para escribir sobre lo que siento. Pero necesito hacerlo, aunque me quite tiempo de descanso.

Los padres se desesperan ante el cierre de los colegios. La gente ha dejado de usar el transporte público. Ya no nos damos la mano. Ya no nos abrazamos ni nos besamos. Nos lavamos las manos continuamente con jabón o gel desinfectante, agotado en todas las farmacias. Pedro sigue teniendo que ir a la oficina, a partir de la próxima semana podrá teletrabajar. Hasta ayer, las terrazas estaban repletas de gente y algunos pequeños comercios se niegan a cerrar. Creo que no somos conscientes del peligro que nos acecha. Si el virus fuera visible, otro gallo cantaría.

Me he puesto el termómetro: 37,8 ⁰C. Me niego a volver a casa. Duermo lo poco que puedo en la sala de espera de hospital. Sigo trabajando. Tengo que hacerlo. La situación es desesperada. Las UCI están al límite, ya no tenemos respiradores disponibles y tenemos que protegernos con bolsas de basura como batas. Pero ahora no podemos perder ni un minuto en quejarnos. Solo empeora las cosas.

Lunes, 16/03/2020

Estoy triste. No podremos celebrar el cumpleaños de Miriam como habíamos planeado. Se ha declarado el estado de alarma. Las calles están vacías. Debemos permanecer confinados en nuestras casas y solo podemos salir para ir al supermercado, a la farmacia o pasear al perro. Menos mal que Pedro y los niños pueden salir a la terraza.

He dejado de trabajar. Quiero, pero no puedo. Así no. He ingresado en el hospital. Me siento cansada. Los ataques de tos son tan fuertes que me provocan el vómito. Tengo picos de fiebre de 38,3 ⁰C. Cada extubación y cada alta se celebra como una gran victoria.

Sobrevivimos gracias a empresas y asociaciones que nos traen comida y bebida. Tenemos que reutilizar mascarillas y guantes, aumentando la probabilidad de contagio entre pacientes y compañeros. Nos sentimos desprotegidos. Pero también más respetados que nunca. La gente sale a los balcones para aplaudirnos. ¡Gracias! Es el apoyo que necesitamos en este momento tan difícil. Los enfermos no pueden recibir visitas, por eso les ayudamos a hacer videollamadas con el móvil. Algunos de ellos mueren solos. Los fallecidos no pueden ser velados y son llevados al Palacio de Hielo, que ahora es una morgue improvisada. Es desolador. Mamá, papá, vuelvo a pensar en vosotros. Se me desgarra el alma.

Miércoles 18/03/2020

Empiezo a agobiarme. Esta noche no he pegado ojo. El termómetro no baja de 38 ⁰C. Me cuesta respirar. Me han tenido que poner oxígeno. Me siento más débil que nunca, apenas puedo permanecer de pie. Hablo entre sollozos con Pedro y los niños. Le pido disculpas a Miriam por no poder celebrar su fiesta de cumpleaños. Llora y dice que no me preocupe, que lo importante es que me recupere cuanto antes. Me despido deseando poder abrazarles cuando todo esto acabe. Lo necesitamos.

Esta crisis saca lo mejor y lo peor de las personas. Mi móvil se llena de mensajes de odio hacia uno u otro partido político, buscando culpables en lugar de soluciones. El aburrimiento y el miedo pueden ser malos consejeros. Por fortuna hay gente que busca ayudar a sus vecinos a hacer la compra, ir a la farmacia, regar las plantas… Otros escriben cartas anónimas dirigidas a enfermos para que se sientan acompañados. Los niños dibujan arcoíris y lo colocan en sus balcones. Algunas empresas donan material sanitario, otras ofrecen sus recursos o sus máscaras de bucear para fabricar respiradores. Me quedo con eso. El amor siempre vence al miedo.

Viernes, 20/03/2020

Hoy no tengo fuerzas casi ni para escribir estas palabras. Por primera vez en mi vida siento miedo a la muerte. No puedo respirar sin oxígeno y el tratamiento no parece funcionar como debería. Me siento impotente por no poder ayudar cuando más se necesita.

Recibo llamadas todos los días. Familiares y amigos que se preocupan por mí. Intento guardar fuerzas para no perder la sonrisa, para ser optimista aunque el pronóstico sea grave, para que siga saliendo el sol aunque vea venir la tormenta. Me entretengo pensando en cómo y cuándo podremos celebrar el cumpleaños de Miriam. Eso, y quizás también los sedantes, me ayuda a dormir aunque sea un rato.

No me puedo engañar a mí misma. Sé que me van a ingresar esta tarde en la UCI. Puede que estas sean las últimas palabras que escriba. Si es así, estoy muy orgullosa de la vida que he tenido, de mi familia y amigos, de mi trabajo. Espero seguir disfrutando de ello, pero, si ha llegado el momento, no estoy triste, estoy feliz. Pase lo que pase, no me arrepiento de nada y me siento profundamente afortunada.

*****************************************************************************

Domingo, 24/03/2040

Hola, mamá. Soy yo, Miriam. Tal día como hoy (parece que fue ayer) se cumplen veinte años desde que nos dijiste adiós. Nada ni nadie fue capaz de borrar tu preciosa sonrisa hasta que te faltó el último aliento. Como cada año, te he traído una flor de camelia blanca, tu preferida, para dejarla junto al memorial a las víctimas de la pandemia.

Hace unos días volví a leer tu diario. Aunque te hayas ido lejos, siempre me ayuda a sentirte cerca. Sé que dedicaste horas a celebrar mi fiesta sorpresa. Sinceramente, hubiera preferido celebrar más cumpleaños contigo que haber viajado por Europa. Disculpa que me tome la molestia de escribir unas palabras para que te recuerden como la heroína que fuiste. Nico me ha preguntado hoy: “mamá, ¿por qué dicen que los médicos como la abuela fueron héroes, si hacían su trabajo?” Por supuesto tuve que explicarle que por aquel entonces os jugasteis la vida para plantar cara al virus sin disponer de los recursos necesarios (que tenemos hoy en día) para combatirlo. Hoy, más que nunca, me siento profundamente orgullosa de coger tu relevo en las urgencias del hospital de Torrejón.

Aunque seguimos viviendo casi con las mismas prisas de siempre, quiero que sepas que hay cosas importantes que han cambiado. Hoy no pensamos en lo que nos diferencia, sino que nos centramos en lo que nos une; hoy, tus nietos no quieren ser futbolistas, quieren ser médicos o profesores; hoy, todos recibimos los mismos cuidados y la misma educación, sin importar dónde hayamos nacido o los recursos que tengamos; hoy estamos más concienciados que nunca en respetar y proteger la biodiversidad de nuestro planeta; hoy dedicamos más tiempo a leer, a escribir, a pensar.

Quiero que sepas lo orgullosos que estamos de ti y lo mucho que te debemos. Gracias por hacer lo posible por conseguir lo imposible; gracias por anteponer siempre las necesidades de los demás a las tuyas propias; gracias a gente y profesionales como tú, nuestro mundo es hoy mucho mejor de lo que fue hace veinte años; gracias a ti vivimos más intensamente el presente y tenemos la esperanza de un futuro más halagüeño.

Fuiste tú la que nos enseñó que cada pequeño gesto cuenta para cambiar el mundo y que los verdaderos héroes no son aquellos que llevan capa, sino los que arriesgan su vida por salvar la de los demás. Sigues siendo nuestra guía, nuestra inspiración, nuestra heroína.

Hoy no tengo más que decirte: gracias.

P.D.: Dale recuerdos a papá de parte de todos.

Lecciones de vida
Comentarios

Artículos de Miguel López de la Oliva

Ver blog
hace 7 años · 3 min. de lectura

Un día cualquiera, 22:00 horas. Entras en Facebook y ves que todo es genial, estupendo, maravilloso. ...

hace 7 años · 2 min. de lectura

Cuando recibí la noticia de ser nombrado embajador de beBee, no lo puedo ocultar, me sentí enormemen ...

hace 1 año · 4 min. de lectura

Llego tarde, llego tarde, a una cita muy importante · ¿Quién no se ha sentido como el Conejo Blanco ...

Puede que te interesen estos puestos de trabajo

  • Cronoshare

    Peluquería para peluquería diaria

    Encontrado en: Cronoshare ES C2 - hace 17 horas


    Cronoshare Pinto (Madrid), España

    Necesito un servicio de Peluquera con las siguientes características:Tipo de evento para el que se necesita el servicio · Peluquería diaria · No de personas para el servicio · 1 · Género del cliente · Femenino · Perfil del cliente(s) · Adulto(a) · Servicios de peluquería que se n ...

  • Cronoshare

    Peluquería para peluquería diaria para 1 persona

    Encontrado en: Cronoshare ES C2 - hace 4 días


    Cronoshare La Pobla de Farnals (Valencia), España

    Necesito un servicio de Peluquera con las siguientes características:Tipo de evento para el que se necesita el servicio · Peluquería diaria · No de personas para el servicio · 1 persona · Género del cliente · Femenino · Perfil del cliente(s) · Adulto(a) · Servicios de peluquería ...

  • Cronoshare

    Peluquería para peluquería diaria para 1 persona

    Encontrado en: Cronoshare ES C2 - hace 17 horas


    Cronoshare Terrassa (Barcelona), España

    Persona mayor que va en silla ruedasTipo de evento para el que se necesita el servicio · Peluquería diaria · No de personas para el servicio · 1 persona · Género del cliente · Femenino · Perfil del cliente(s) · Persona mayor · Servicios de peluquería que se necesitan · Peinado co ...