YA LO DIJO EL DR. HOUSE: TODO EL MUNDO MIENTE

Realmente no sé si todo el mundo miente, entendiendo el “todo” como todas las personas que nacemos y morimos en este maravilloso planeta. Siendo sincero, valga la paradoja, me gustaría que no fuera así. Sin embargo, mi experiencia en el mundo comercial si me ha enseñado que muchas veces por unas u otras razones, otro día hablaremos de los motivos, la gente mentimos. A lo largo de todos estos años he visto mentiras de todos los tipos, colores, texturas, y es por ello que me he decidido a realizar mi propia clasifación de la mentira, llevándolo al terreno de la venta: 

• LA MENTIRA CLARA: es aquella que la ves venir. Que nada más empezar hablar con un cliente, sabes que te está mintiendo. Quizás ni siquiera haya empezado el proceso de la venta, pero ya sabes que el cliente miente. Comparado con un acusado de asesinato, es aquel cliente, que ya de entrada se contradice, que no cuenta bien sus necesidades, o las cambia, y que sabes que la verdad para él se fue de vacaciones a Benidorm a ponerse barros para la circulación. 
• LA MENTIRA EGOCENTRICA: es la que dice ese cliente, que nada tiene que ver con el proceso de la venta, pero que es el batido de fresa que se toma su ego al sol. Y con esta mentira, te puedes encontrar a un comprador que fue un modesto contable de una compañía telefónica, siendo según él, el responsable de la finanzas de toda Sudamerica para esa compañía. 
• LA MENTIRA QUE NO VES: Esta es peligrosa, y dañina. No la ves. Como atracador en un callejón obscuro se mete en el proceso de venta, y ha hecho que te descoloque, que no sepas detectar bien la necesidad del cliente, y que le estes ofreciendo unas gafas de cerca a un ciego. 
• LA MENTIRA FAMILIAR: Es aquella que se hace en grupo. Una familia va a comprar un coche por ejemplo y el padre le dice a su familia al completo que le digan al vendedor que de momento no van a comprar nada, cuando no es cierto. Esta mentira está muy expuesta. Ya que si ya es difícil mantener una mentira uno solo, ésta tiene muchas grietas cuando se hace en grupo. Si el vendedor es hábil con las preguntas, algún miembro cederá y terminará por poner la carta mal en el castillo de naipes de la mentira, consiguiendo que ésta se derrumbe. 
• LA MENTIRA IDIOTA: Es aquella que ni sirve, para el ego, ni para sacar información, ni para conseguir ventaja en la negociación, ni para nada. NO quiero decir, que si una mentira sirve para algo esté justificada, pero es que en este caso la mentira es idiota pues no sirve para nada. Es ir a comprar un colchón y decirle al vendedor que has comido unos macarrones gratinados que te han sentado fatal, cuando has comido acelgas y huevos fritos con chistorra. Si el vendedor está atento, pronto lo sabrá por tu aliento. Será una mentira rápida en nacer y más rápida aún en morir. 

Y así y con otros tipos de mentiras, vamos por la vida. Sin ganas de que nos conozca la gente, y enfrentándonos a procesos de la compra/venta sin ser sinceros. Pues en el proceso de la venta, la mentira lo único que puedo traer de la mano es que no se consiga satisfacer bien la necesidad del cliente, y que la negociación termine con un TU PIERDES YO PIERDO, que es la antítesis de cualquier buen proceso de negociación. 

Y si esto que digo es mentira, que venga el Dr. House y me lo diga. 

Francisco José Paredes Pérez