Foodie Managers (extra ball)

Cerca de las oficinas centrales de beBee tenemos varios restaurantes y uno de ellos se ha ganado un puesto bastante bueno. Este es El Pradal, junto a Antena 3. Tienen un menú variado compuesto de platos de bastante elaboración y tocando diferentes cocinas y culturas, sin apenas repetir plato día tras día. Como muestra vamos a dar un repaso de los platos degustados un día como hoy, en el que la temática iba por las tierras peruanas.

Para empezar tenemos un ceviche de corvina en ajo blanco. Una fresca mezcla de citricos que hay que tomar con cuchara. Con el ajo blanco que enlaza a los cítricos y los suaviza, que combina perfectamente con la corvina, que en este plato se presenta fileteada como para carpaccio.

Además de este refrescante y sabroso platillo, tuvimos la oportunidad de probar otra delicia de la cocina peruana con una Causa Limeña, preparada con una patatas machacadas, aderezadas con ají, y cubiertas con aguacate, lima y cangrejo y acompañado de crujiente de plátano, rábano y cebolla. Este plato junta el picante del ají con el ácido de la lima, que se prolonga mediante la untuosidad de la patata cocida y acompaña muy bien a la textura y delicadeza de la carne de cangrejo. Resulta un plato muy apropiado para los días calurosos, el ají marca la diferencia.

Con estos dos entrantes tan refrescantes ya habíamos abierto apetito para el plato principal, esta vez más andaluz. Consistía en unos trozos de pluma ibérica acompañados de unas mini papas arugás y un chimichurri con base de encurtidos. La pluma con un acabado perfecto, nada grasiento, en su punto de cocinado. Tan tierna que se deshace en la boca sin problemas, y con un sabor que delata el carbón en el que se ha asado. Las mini papas acompañan bien una carne tan sabrosa, y para seguir con el frescor, el chimichurri de encurtidos refresca con su toque avinagrado.

Ya para finalizar, pasamos a unos postres variados, entre los que pudimos disfrutar de una crema de maracuyá sobre sorbete de café, una mouse de chocolate con trozos de chocolate blanco y un sorbete de frambuesa sobre piña natural. Otra vez repitiendo sabores ácidos y una mouse de chocolate super ligera, capaz de maridar perfectamente con todo lo anterior.

Con platos así en el menú del día, no es de extrañar que repitamos a menudo y para ocasiones especiales!