CUESTION DE.... ¿SUERTE?

"Yo creo bastante en la suerte y he constatado que cuanto más duro trabajo, más suerte tengo". (frase sugerida por Juan Manuel López Orta).

¿Es la suerte simple azar?. Y no me refiero a jugar a la lotería o en el casino. Dimos el nombre de suerte a todo aquello que no éramos capaces de controlar y condicionaba para bien o para mal nuestra vida. Con esta premisa, asumimos la existencia de un ser superior que decide las bondades o maldades que viviremos.

Es una idea. Tal vez ese ser supremo se encuentre sentado en algún lugar decidiendo si nos toca sufrir o disfrutar. O tal vez, el concepto "suerte" dependa más de uno mismo que de un Dios juguetón.

Habitualmente, los más afortunados son aquellos que se ponen las pilas. Me explico. Tener suerte en tu trabajo, implica saber aprovechar todas las oportunidades que se te presentan y lidiar estoicamente con aquellos momentos complicados que hacen que muchos arrojen la toalla antes de tiempo. Trabajas duro y la suerte parece que llega irremediablemente.

Puedes conocer cientos casos de personas que aún trabajando muy duro, la suerte parece que les ha abandonado. Creo, desde mi punto vista, que ahí la actitud es fundamental. Una actitud positiva, de superación y paciente termina por tener un resultado positivo. Puede que no sea el imaginado, pero será una pieza importante en la consecución de un objetivo final. Pero queremos las cosas rápido y ya. Y por experiencia sé que éste juego no funciona así.

En otras facetas de la vida, la suerte funciona del mismo modo. Queremos encontrar el amor perfecto, pero nos quedamos en casa esperando a que nos llame ( ¿crees que tu número de teléfono le vendrá a la mente por arte de magia?). Esperamos que nos toque la lotería jugando de vez en cuando hasta que nos autoconvencemos de que es imposible que nos toque y dejamos de comprar.

Y en otras ocasiones, las cosas pasan de un modo cíclico. Un suceso negativo se contrarresta con uno positivo en el futuro, y viceversa. No es tener suerte o mala suerte, es estar vivo. Ese es el matiz. La vida está repleta de experiencias que son eso, experiencias. Las negativas habrá que superarlas y las positivas, disfrutarlas. Todos pasamos por ambos extremos en diferentes ocasiones y es especialmente en las negativas, cuando debemos tener los ojitos y las orejas bien abiertas para aprender de ellas, o simplemente trascenderlas.

O quizá, todo esto no sea más que una paranoia mía y realmente si exista esa deidad juguetona y cargada de mala leche que se divierte a costa nuestra sin poder hacer nada al respecto. Es tu decisión. Creer en tu capacidad de forjar tu propia suerte...  o no. ¿Qué te hace sentir mejor?.

En mi caso, elijo creer que soy el creador de mi propia suerte. Me va bien pensar así. Y aunque aún estoy a medio camino de mis objetivos, confío en que la "Diosa Fortuna" se portará bien conmigo.

(Post realizado gracias a la idea de Juan Manuel López Orta)