Relato corto El Conductor

¡Hola abejitas y abejorros!

He iniciado mis aventuras literarias. Os comparto mi primer relato corto. 

El Conductor

Hoy llegué en la patrulla al mismo barrio que he frecuentado en las últimas semanas. Bajé del vehículo e inicié mi ronda de inspección. Las personas que encontraba me saludaban alegres.

De repente se escuchó un frenazo seguido de un estruendo. Un silencio sepulcral invadió la calle. Quedé inmóvil por un par de segundos. Mi corazón latía con tanta fuerza que lo podía escuchar. Mi vista se nubló. Escuché pasos apresurados, cada vez más cerca. Alguien corría hacia mí. Se detuvo. Puso sus manos en mis hombros, me sacudió con desesperación y dijo: ¡Se lo ruego, ayuda, soy Carlos Martínez, hay tres personas atrapadas en el coche que conducía, están a dos calles de aquí!

La adrenalina recorrió todo mi cuerpo, activando mi espíritu de supervivencia. Corrí a toda velocidad. Había un amasijo de hierro. Saqué los cuerpos lo más rápido que pude y los puse sobre la acera. Les tomé el pulso. Los tres primeros estaban inconscientes, pero vivos gracias a Dios.

Tomé el pulso del último. No lo sentía. Lo intenté reanimar ¡Nada! Registré sus bolsillos en busca de una identificación. Mi corazón se detuvo dos segundos cuando encontré la licencia de conducir de Carlos Martínez ¡El conductor!