Quemar las naves, su historia

Utilizamos esta frase cuando nos referimos a una situación en la que deseamos y hacemos todo lo posible para que no haya vuelta atrás. En un mundo como el de las ventas tirar de heroica siempre desgasta y mucho. En el siguiente post me pregunto ello.

La frase "Quemar las naves" hace mención directamente a tirar de heroica. Es una metáfora que nos enfoca en un único objetivo y volver sobre nuestros pasos ya no es una opción. 

Ahora nos ponemos en situación. Existen dos referencias históricas a esta frase: 

- Una de ellas tiene origen español: se refiere a la destrucción de las naves de Hernán Cortés, un tópico originado en la decisión de este durante la Conquista de México de inutilizar sus naves para dejar claro a sus hombres que la retirada era imposible (1519) Con esta acción conquistó México después de varios intentos!!

- La segunda nos lleva a tiempos de Alejandro Magno. Concretamente en el siglo III antes de Cristo, tal y como refleja Manuel Campuzano en su libro «Alejandro Magno. La excelencia desde el liderazgo» Al parecer fue el rey de Macedonia quien dio vida a esta expresión a partir de una maniobra militar. Cuenta el libro que, al llegar a la costa Fenicia, Alejandro Magno observó que sus enemigos le triplicaban en número y que su tropa se veía derrotada antes de pisar el campo de batalla. La historia indica que Alejandro Magno con esta acción llevó adelante una de sus más célebres conquistas.

- Cuántas veces en nuestra vida profesional hemos tirado de esta frase para sacar adelante un objetivo?

Es por ello que la manera para no caer siempre en "quemar las naves" es la planificación y la actitud positiva. Si planificas correctamente, siempre apoyado por tus líderes y asesores, tu día a día y lo sumas a una actitud avasalladora llegaras a cumplir los objetivos holgadamente. Y solo quemaras las naves en ciertos momentos para dar un plus extra. 

He comprobado en base a mi experiencia y la de muchas personas que me han volcado la suya en charlas de café, que la mejor manera de hacer que las cosas sucedan y llevar una vida organizada y de momentos de felicidad es ser constantes y utilizar la aceleración final solo en circunstancias puntuales.

Cuál es la consecuencia de quemar las naves? 

Esta acción, que aquellos que sentimos pasión por las ventas sabemos de primera mano, provoca exigir al máximo una situación. Sobre todo exprimirnos a nosotros mismos o a nuestro equipo de trabajo en vía de llegar a la cima. Y como siempre que se exige una situación pueden desencadenar dos sensaciones: 

- La felicidad de conseguir un objetivo por este medio es sublime, porque te sientes valorado y en segundo lugar, si estás en el camino de convertirte en un líder -más detalles en mi post El arte de saber gestionar- habrás demostrado tu capacidad de mando y tu cintura para “gambetear” los problemas y dar respuestas rápidas y eficaces para mantener a flote tu equipo. Habrás dejado huella. Te irás haciendo de un nombre y prestigio en la organización. No podemos negar que hacer un gol en el último segundo se festeja más que hacerlo en el inicio del partido.

- Pero también puede terminar en frustración y la suma de frustraciones por "Quemar las naves" se proyecta en fracaso. Empiezas a poner en duda si eres bueno haciendo lo que estás haciendo. Fallar es parte de vida, sin embargo cuando nos ponemos el listón muy alto no nos permitirnos fallar.