Homenaje al piloto español

He visto estas palabras de nuestro amigo  en Facebook y no me he podido resistir a reproducirlas para nuestros lectores en beBee.

Me impactó el trágico accidente que sufrió el día de la Hispanidad un capitán del Ejército del Aire. Mi padre fue piloto de caza de la XI promoción, justo 50 promociones anterior. Varios compañeros de su promoción perdieron la vida en accidente de aviación siendo aún jóvenes.

Esta es su versión de los hechos (sin contar con más información que la ofrecida por los medios): En el momento de aproximación a la Base Aérea de Albacete los pilotos de los reactores en formación proceden a la maniobra de ruptura. Esta es una maniobra que consiste en romper la formación para poder aterrizar.

Los cazas recorren en vuelo la pista de aterrizaje y, al llegar a la cabecera, el jefe realiza un viraje de 180° para enfilar la pista y aterrizar. Cuando aún está en la pista lo hace el segundo de los reactores en formación y así sucesivamente. De esta forma consiguen distanciarse y aterrizar consecutivamente.

Esta maniobra se realiza a una velocidad baja que permite una sustentación mínima adecuada para el aterrizaje. Al piloto le debió fallar el motor justo cuando iba a proceder a efectuar esta maniobra. La baja velocidad que llevaba en ese momento así como una altura baja no le iba a permitir planear una larga distancia y llegar a la pista. El piloto vio que el avión se dirigía a una zona de viviendas por lo que decidió no eyectar el asiento.

El mecanismo de eyección puede utilizarse incluso con el avión en tierra pues proyecta el asiento a suficiente altura para el paracaídas. Sin embargo, el avión habría continuado su trayectoria hasta estrellarse contra la urbanización.

El piloto decidió utilizar los segundos restantes para intentar cambiar la trayectoria del avión. Realizó un viraje para enfilarlo hacia un sembrado. El problema es que el viraje hace que la nave pierda velocidad por lo que el avión perdió la mínima sustentación y, llegado ese momento, el avión cae a plomo.

Todos pensaríamos que el reactor podría haber aterrizado en el sembrado. Pero eso es más bien de película. Según mi padre un caza sólo puede aterrizar en pista. Las opciones son solamente pista o eyección. El piloto sabía lo que hacía y sacrificó su vida. "Es un héroe ", terminó diciendo mi padre.

Sirva de homenaje a todos los pilotos que se juegan la vida y que están dispuestos a perderla si con eso salvan otras. Y a sus familias, que frecuentemente tienen que vivir en vilo.