El sedentarismo causa el 30% de los infartos

La inactividad física es ya el cuarto factor de riesgo de mortalidad, causante del 6% de las muertes que se producen en el mundo y del 30% de las cardiopatías isquémicas (infarto y angina de pecho),  según la Organización Mundial de la Salud.

A pesar de estos alarmantes datos, todavía existe un 60% de la población mundial sedentaria. En España, y según la Encuesta Nacional de Salud, es el 35,86% de los hombres y el 46,64% de las mujeres los que se consideran sedentarios.

150 minutos semanales de ejercicio

En cambio, existe mucha evidencia científica que demuestra los beneficios de la práctica de actividad física. Según la World Heart Federation, realizar 150 minutos a la semana de ejercicio moderado o una hora de ejercicio vigoroso, puede reducir hasta en un 30% el riesgo coronario.

Así, los ejercicios aeróbicos o de resistencia presentan beneficios cardiacos, ya que mejoran la estructura y función tanto del corazón como de los vasos sanguíneos, contribuyendo a reducir la presión arterial y la frecuencia cardiaca, los niveles de colesterol, disminuyendo el peso graso y facilitando el control de los niveles de glucosa.

#Salvacorazones

Por ello, en el marco de la VII Carrera Popular del Corazón celebrada en Madrid con más de 4.000 participantes, la Fundación Española del Corazón (FEC) ha recordado que la práctica de ejercicio físico es fundamental para la prevención de la enfermedad cardiovascular, primera causa de muerte en nuestro país.

VII Carrera Popular del Corazón

La FEC se ha marcado un importante reto: salvar 30.000 vidas cada año. A través de la campaña #Salvacorazones (www.salvacorazones.com)  la fundación pretende aumentar los recursos destinados a la investigación y la prevención de las enfermedades cardiovasculares en nuestro país.

“Desde la Fundación Española del Corazón luchamos para que vivir de forma saludable sea una prioridad de la población”, explica el doctor Carlos Macaya, presidente de la FEC. “Los beneficios cardiovasculares en la práctica de la actividad física son innegables: mejoran la estructura y la función tanto del corazón como de los vasos sanguíneos, contribuyendo a reducir la presión arterial y la frecuencia cardiaca, los niveles de colesterol, disminuyendo el peso graso y facilitando el control de los niveles de glucosa. 

Los beneficios de la actividad física existen en todas las edades

Así, un estudio presentado en el último Congreso Europeo de Cardiología revela que en el ejercicio físico moderado en personas mayores de 65 años disminuye la mortalidad cardiovascular en un 50%.

Aunque el efecto beneficioso del ejercicio es evidente, el Dr. Macaya avisa de que, “aquellas personas que padezcan algún tipo de enfermedad cardiovascular deben consultar previamente con su médico qué tipo de deporte, y en qué intensidad, pueden practicar. Además todos aquellos que deseen empezar una actividad intensa deben realizarse un chequeo médico previo que descarte cualquier posible enfermedad”. 

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