Cuando tienes cierta edad, y los complejos los dejas a un lado...

Hace tiempo que voy percibiendo que no todo lo que nos rodea se basa en normas o reglamentos, para cumplirlos "inpepinablemente"...todo tiene su margen. Yo no sé si es por mi experiencia en la vida (de los errores se aprende, volvemos a tropezar, y ya no nos pasa más) pero llevo algunos años, que la seguridad tanto en la vida, como en el ámbito laboral, la construyo yo mismo. El mundo, no es perfecto, ni mucho menos, pero a todos nos gustaría verlo con un resquicio de justicia, de empatía, de serenidad.... Pero siempre hay quien nos etiqueta de tal o de cual. Los de tal sitio, son "delincuentes" los de tal otro "radicales"... 

A día de hoy, no creo en las generalidades. Hay de todo en todas partes, más en unos lugares (por algún motivo) que en otros. El hecho de vivir en una sociedad polifacética y pluri-cultural hace que nos adaptemos los unos a los otros, sobre todo mediante el respeto.

 Trabajo en horarios poco habituales, (cuando se precisa) y trato con muchas personas al cabo del día, cada uno con sus problemas, y observo que lleve gorra, esté gordo, tenga voz de pito, vaya sin afeitar.... (es un ejemplo)... Voy a realizar mi trabajo, lo mejor posible, y con el respeto hacia los demás y de los demás.

Eso es lo que vale. El valor humano.