5 limitaciones en la vida de un hombre a causa del machismo.

Pensamos que el machismo tiene una sola víctima, cuando en realidad es la sociedad entera la que se encuentra enferma de traumas no sanados. Las relaciones hombre- mujer son fabricadas en un molde que dependiendo de la región, religión y cultura se van modificando.

El patriarcado, junto con su superamigo, el machismo, siguen regulando los límites propios y colectivos. La forma en la que amamos, los amigos que elegimos; lo que decidimos decir o guardar para nosotros mismos; la ropa que vestimos; e incluso la forma en que tenemos relaciones íntimas está limitada por creencias, pensamientos y normas de conducta que nos impiden explorarnos y explorar al otro de una forma saludable, sana y principalmente respetuosa.

Los hombres cisgénero no son los únicos en reproducir el machismo, las mujeres también lo hacemos, por lo cual las relaciones, principalmente heterosexuales, continúan siendo machistas de lado y lado. Sí chicas, no toda la culpa es de los hombres, nosotras también tenemos actitudes que fomentan la desigualdad. Las normas de conducta social aplican para los hombres también, tenemos la impresión que por ellos son personas más libres en el ámbito físico, y tangible no sufren las consecuencias de los estigmas y prejuicios respecto a su físico, actitudes y formas de ser.

Este artículo resume en cinco puntos aquellos estigmas y normas no establecidas en lo cotidiano o en nuestras conversaciones comunes, pero sí en lo insconciente del género masculino.

1. No pueden relacionarse de forma auténtica.

Los hombres tienen algo realmente digno de admirar ya que mantienen a su niño interior vivo sin importar la edad. Siempre estan haciendo cosas que estimulan su creatividad y su capacidad de jugar. A través del juego creamos relaciones más intimas, pues compartirmos experiencias. Existe esta falsa idea, de que al llegar una mujer, ellos necesitan comportarse “mejor”. Con esto nos referimos a su manera de hablar, los chistes que hacen, la forma en la que se expresan, el tono de voz e incluso su esencia.

La idea de la mujer super femenina colocada en un pedestal es un obstáculo para una relación de par a par. El hombre se reprime varias partes de su personalidad con la idea de conquistar a este arquetipo de mujer; lo que impide una relación verdadera, sincera y real.

2. Reprimen sus emociones.

Por evolución las mujeres somos seres más íntimos, mientras los hombres salían a cazar y su pensamiento principal era sobrevivir; las mujeres se quedaban en la comunidad compartiendo saberes de las plantas y administrando la comida para la estación. Se podría decir que por energía natural, las mujeres podemos navegar entre lo íntimo y lo mundano muy facilmente.

En el caso de los hombres, es totalmente lo contrario. Desde niños fueron educados a no llorar si deseaban hacerlo, a aguantar como macho. Emociones como la ira y la competitividad fueron estimuladas, y al sentir tristeza o dolor se las utilizó como método de humillación. La tristeza ha sido asociada con la vulnerabilidad y un hombre jamás podría ser visto como alguien vulnerable, ni por el mismo, ni por sus amigos, ni por los demás. Entonces, imaginen el peso y la presión interna que se desarrolla en la mente masculina por emociones que son naturales del ser humano.

Un amigo de Israel me dijo una vez: “Yo tengo una teoría de por qué los hombres mueren antes que las mujeres. Reprimen tanto sus emociones que cuando llegan a sus 60, les da un paro cardiaco y mueren.” ¡Y sí! Es gracioso, pero no deja de ser verdad. Hoy en día sabemos lo que el estrés, el burnout causa en nuestro cuerpo, los daños de la represión emocional pueden ser igual o peor.

Desde niña siempre cuestioné lo que sucedía alrededor mío. Cuando preguntaba a mi padre la razón real de su enojo; su respuesta siempre fue: ¡Te callas y me haces caso, porque soy tu padre! No obstante, para mí, eso nunca fue suficiente, yo quería saber el porqué y mi papá siempre reaccionaba violentamente ante la búsqueda de una explicación como si yo lo estuviese desafiando. Con el tiempo entendí que no tenía nada a ver conmigo, sino con su capacidad de poder expresar y comunicar lo que tiene dentro de sí mismo. Entender el origen real de su enojo. Al final, reaccionar violentamente era la forma en la que había aprendido a ser como hombre.

Esto lo vemos a nivel individual, pero lo podemos ver reflejado a nivel social. Como es adentro es afuera. Vivimos en una sociedad que no sabe resolver conflictos, la violencia aún continúa siendo un método de resolución, y esto tiene mucho que ver con nuestra incapacidad de lidiar con las emociones de forma saludable, así como el no saber expresarnos de manera correcta y civilizada.

3. No exploran el sexo y sus placeres.

¿Pensaban que por qué los hombres piensan en sexo todo el tiempo, quiere decir que lo disfrutan de verdad? ¡Pues No!

En primer lugar, se relacionan de una forma limitada. A la mujer a la que aman tienen que respetar en la cama y con la puta pueden tener sexo violento. Tenemos esta idea boba de diferenciar entre hacer el amor y tener sexo, cuando en realidad, el sexo se trata sobre ser uno mismo, sobre mostrarse tal y como eres, desnudo y abierto a recibir y dar placer.

Si no buscamos dar placer al otro, no estamos viviendo la experiencia real de la sexualidad, en ese caso es más fácil masturbarse y ya.

Y hay que ser realistas, las mujeres colocamos 100% de la responsabilidad en el hombre a la hora del sexo y cuando no nos gusta lo que hacen, fingimos. Gemimos hasta que el sexo termine y eso se ha transformado en lo normal. ¿Qué loco, verdad? Entonces los hemos estado maleducando por años sobre nuestro cuerpo. Y es que fuimos educadas a que somos objeto de placer masculino, si el hombre goza, el sexo termina y ya.

En segundo lugar; puede existir veces que un hombre no siente atracción por una mujer, no se siente dispuesto a tener relaciones con ella. Pero que pasá, si esta chica esta dispuesta a tener relaciones con él? Y él no lo aprovecha? Sus amigos seguramente lo llamarán de gay o de poco hombre. Mi mejor amigo me comentaba que ya tuvo relaciones con mujeres pensando en otra, solamente porque no quería que lo vean como menos hombre.

La presión sobre el sexo, viene también de esta idea del hombre macho que no puede decir no al sexo; sus instintos son más fuertes que su humanidad. Lo grave es que eso está totalmente normalizado. Las explicaciones acompañadas de “es hombre” son muy comunes en nuestra sociedad, como si careciesen de inteligencia y autocontrol.

Por otro lado, el niño se asusta del cuerpo femenino, y digo niño, porque solamente un hombre de verdad puede lidiar con la naturaleza de la mujer sin tener asco. El periodo, squirt, un pedo vaginal y muchas cosas que son tabú de hablarlas pueden ser des motivantes para un niño ignorante y un motivo de trauma para la mujer que recibe asco frente a su cuerpo.

4. Se sienten plenos solamente si ocupan el papel de “protector” con una mujer a quien “cuidar”.

¿Cual es la imagen del empresario exitoso que tenemos? Aquel hombre con todas sus metas conquistadas con una mujer super modelo a su lado. El empresario exitoso no busca una mujer en su mismo nivel profesional, busca alguien a quien proveer, a quien cuidar.

Muchos hombres tienen este vació grande en su vida y buscan siempre relacionarse con mujeres mucho menores a ellos. No fueron educados para tener a su lado una amiga, una compañera. Fueron educados para tener un trofeo, una niña. Si el hombre no se siente útil con su compañera, su autoestima puede verse muy afectada de verdad, aquí no se trata del miedo como se dice en los medios. Se trata sobre una educación que los enseño a sentirse plenos solamente si estan cumpliendo aquel papel de proveedor, tomando la pocisión de poder. En realidad tiene que ver mucho con el ego, el cual solamente se siente seguro si las condiciones de poder son mayores para él, que para ella.

5. Tienen una gran dificultad para relacionarse con sus propios deseos y con la comunidad LGTBIQ+

Aquí juega un papel importantísimo el ego masculino. Aquella idea de que el mundo gira en torno de ellos. Si es que un amigo cercano se declara gay, automáticamente piensan que ellos son el blanco de ese amigo. Lo cual es muy bobo y egocéntrico, pero también tenemos que culpar a las películas que tuvimos en nuestra infancia que muestran que el amigo gay está siempre enamorado del protagonista.

Los gays son totalmente reprimidos principalmente por su forma “afeminada” de ser. Es que cuando entendamos que todas las personas tenemos energía masculina y femenina en nuestro interior, vamos a poder lidiar con estas situaciones de una forma más tranquila y civilizada.

Los hombres no pueden relacionarse con la comunidad gay, principalmente, porque reprimen en ellos mismos cualquier actitud que apele a la energía femenina. Ser afeminado es motivo de discriminación e incluso de violencia y bullying hasta llegar a matar. Muchos de estos hombres que cargan esa rabia interna en contra de los gays, es porque de niños jamás pudieron expresar su lado femenino de manera saludable. O tal vez, en ellos exista un grado de homosexualidad que no saben como lidar y al no poder enfrentarse a sus propias sombras lo reflejan en el otro a través de la rabia y el enojo.

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